Un niño que tiene seguridad en sí mismo y ha logrado
desarrollar gran tolerancia hacia la frustración, suele destacar entre los
demás como un niño líder. Asimismo, cuando vive carencias en su hogar puede
desarrollar habilidades de líder en su búsqueda por el reconocimiento y la
aprobación que no encuentra en casa. El niño líder se dirige a metas y
motiva a los demás a crecer, aunque también se conoce que muchas veces el
liderazgo no es bien llevado y se crea el liderazgo negativo, el cual se manifiesta
en los niños durante la época escolar.
Cuando se trata de niños lideres
negativos, se caracterizan por ser quienes fomentan el desorden dentro del aula,
influenciando a sus otros compañeros a seguir sus malas actitudes, lo cual
muchas veces llega a convertirse en un serio problema de conducta.
En mi experiencia como docente, y actualmente de tercer
grado, he observado que el grupo de escolares tienen muchas rivalidad de
liderazgo, ya que tienden a crear confrontaciones entre sí, además que en su mayoría
son varones, teniendo fuerza el tema del sexismo por ambas partes, siendo el
grupo dominante los hombres, sin embargo las mujeres suelen mantenerse en la
línea del liderazgo y esto es punto de tensión para todos, queriendo ellos
tener siempre el control totalitario de las situaciones sobre ellas. Lo cual ha
sido difícil de llevar, por eso es importante desarrollar hábitos que puedan
crear la costumbre en los niños de escucharse, tolerarse, respetarse;
motivarlos a compartir, colaborarse y llevarse mejor los unos con los otros.
Lcda.
Crisbely Jaimes
Docente
Titular de 3º Grado
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