Cuando
los niños son llevados por primera vez a la escuela, los padres se enfrentan a
la difícil decisión de si dejarlos o no, ya que sienten temer por el mundo que van
a enfrentar. Vale la pena hacerse la pregunta: ¿Cuál de las dos partes sufre
más? ¿Los padres o los niños? En muchos casos, los padres sienten mucho pesar
al dejarlos en el colegio, expuestos a que les pase algo; pero no llevarlos, no
está bien, porque con ello, los privamos de la oportunidad de disfrutar con sus
pares actividades planificadas especialmente para su momento evolutivo, que
contribuirán a su desarrollo.
En
mi experiencia como mamá cuando mi hija asistió
por primera vez a la escuela y llegó saludando a las profesoras con una sonrisa
en su cara y moviendo su manita, noté que no le afectó el hecho de estar
a un sitio diferente con personas que nunca había visto. Me decía: “Mami chao”
y eso me afecto porque yo no quería separarme de su lado, fue difícil, pero al
pasar los días comprendí que ella necesitaba jugar con otros niños y
quería su propio espacio para obtener nuevas experiencias para el futuro. Hoy
en día mi hija tiene 9 años de edad es una niña responsable, alegre e independiente
a la que le gusta mucho la Escuela.
T.S.U
Iliana Leal
Docente
Auxilia de Maternal 3